Mirar desde el aire y excavar la tierra son procesos distintos, pero ambos crean imágenes a gran escala del territorio que habitamos. La mirada desde el aire nos devela las huellas y accidentes de la superficie terrestre en el plano horizontal, mientras que a través de la mirada geológica observamos las superposiciones de sedimentos a lo largo de miles de años. Más allá de construir un objeto, la intención fue crear piezas como territorios o lugares, que podamos habitar y relacionarlos con nuestro cuerpo. El territorio mirado desde la altura o excavado revela sus estado inacabado, abierto, fluido y en constante transformación.
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El Material del Paisaje
Piedras de diversos estratos geológicos de los Andes